lunes, 11 de abril de 2011

Geopolítica de América del Sur


Hace poco se ha escogido dos opciones políticas en nuestro país. Una representa una opción de izquierda-nacionalista que propone un modelo alternativo al actual basado en el fortalecimiento de los mercados internos y el comercio justo, y la otra una derecha-conservadora que ha tenido y tiene entre sus filas una serie de personajes vinculadas a una de las dictaduras cívico-militares mas violadora de los Derechos Humanos en nuestro país.
           
 En esta ocasión presentaré un análisis que he realizado sobre este tema y lo vincularé al aspecto geopolítico de Suramérica. Empezaré por la primera opción:

Consolidación de UNASUR

Es ya sabida la buena relación que Brasil mantendría con un eventual gobierno de Ollanta Humala debido a la afinidad ideológica. El Partido Nacionalista desde antes de las elecciones mantuvo una buena relación con el Partido de los Trabajadores de Brasil (actual partido de gobierno) y uno de sus puntos de coincidencia pasa por el hecho de las relaciones estratégicas para América del Sur. La consolidación de UNASUR pasa por un Perú que tenga una agenda mas abierta a la inserción sudamericana, donde el río Amazonas, la carretera interoceánica norte y sur sea el eje pivote de dicha integración. El eje Perú-Brasil consolida la posición bioceánica de nuestro continente lo que favorece inmensamente a nuestros puertos del Callao por el centro, Matarani por el sur y Paita por el norte, lo que a su vez impulsará la reactivación de nuestra marina mercante y una mayor competitividad de ENAPU. Es por esta razón que dentro de las propuestas de “la gran transformación” encontramos el fortalecimiento de ENAPU como eje geoestratégico nacional y regional debido a la importancia geopolítica que ocuparía dentro de UNASUR. Otro de los beneficios de la consolidación de UNASUR vendría a hacer el mercado común para nuestra industria debido a que podrían transitar por toda Sudamérica sin sobre-costos debido a cuotas arancelarias. Por otra parte la idea de Venezuela y Ecuador de una moneda única en nuestro continente que sería emitida en el Banco del Sur (sede – Buenos Aires) daría mayor estabilidad monetaria ante las constantes fluctuaciones financieras externas. Para poder redondear esta idea, la Unión Europea sacó adelante a países más pequeños que las grandes economías como eran Alemania, Reino Unido o Francia debido a esta integración regional bajo la tutela alemana. Muchos han puesto objeción y han criticado el hecho que Brasil crearía esto para favorecer a sus intereses y en especial a de sus grandes empresas paraestatales, pero lo cierto es que toda entidad supranacional siempre tiene un país que resalte por encima del otro (Alemania en la UE, Estados Unidos en la OTÁN, Arabia en la OPEP, etc.). Termino esta parte diciendo que es necesaria de una vez la unificación de Sudamérica, puesto que todas las guerras que hemos tenido mayormente han sido desatadas por interferencias externas (Reino Unido en la Guerra del Pacífico, Guerra del Chaco o la Triple Alianza, EEUU en la independencia de Panamá de Colombia), por el contrario tenemos mas cosas las que nos unen, como el idioma, lo étnico, la cultura, el folklore, la música y nuestras tradiciones propias de nuestro continente.

Formación de dos bloques Antagónicos:

En una futura elección de Keiko Fujimori se consolidaría la formación de dos bloques regionales, bloques que ya están siendo impulsados por el presidente Alan García (Perú), Sebastián Piñera (Chile), Juan Manuel Santos (Colombia) y Felipe Calderón (México), bloque que se formaría en torno a un modelo de libre mercado, un modelo neoliberal que ya ha tenido 20 años en el Perú, 33 años en Chile, 20 años en Colombia y 28 años en México. Todos presidentes de derecha (incluyendo el converso de García) han decidido formar este bloque en contra respuesta a la formación de un bloque de integración latinoamericana formada por Unasur y países como Nicaragua, República Dominicana y El Salvador que proponen un modelo de desarrollo alternativo. Sin duda alguna con la eventual victoria de Keiko Fujimori sería la consolidación de este bloque que ha demostrado que en materia social ha tenido serios problemas (con excepción del periodo socialdemócrata de Lagos y Bachelet en Chile por 10 años) y que la agudización de la brecha social aumenta constantemente en México o Perú, dando paso a una violencia generalizada que se esconde y refugia en los brazos del narco-terrorismo tal como sucede en Colombia y en las zonas del VRAE y el Huallaga en Perú. Analizando desde otra perspectiva, la formación de este bloque político-económico en la región agudizaría más aún las tensiones que hay entre muchos países de la zona lo cual generaría una especia de “Guerra fría Latinoamericana”. Esta política de división en nuestro continente es ya un sabido juego de los países dominantes del hemisferio como Estados Unidos o Reino Unido que siempre han jugado a ponernos uno contra los otros y de esa manera evitar el progreso de nuestra región. Es por ello que considero que geopolíticamente sería terrible para el Perú prestarse a este juego a nivel regional y ocasionar más de una aspereza a nivel regional.

Conclusiones

Apuesto por la consolidación de un bloque sudamericano sólido y fuerte que pueda servir de organismo supranacional protector de nuestra soberanía regional ante el mundo. El progreso económico que viene tras el intercambio comercial y cultural favorece mucho mas a las diversas industrias que existen en nuestro continente. Por otro lado el fortalecimiento de un bloque antagónico formado por la derecha de Perú, Chile, Colombia y México solo serviría para avivar conflictos regionales y ser una especie de organismo supranacional que sirva a los intereses de grandes transnacionales y monopolios estadounidenses.